Sant Pau

Rebranding de un hospital histórico

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Hospital de Sant Pau

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Sector
Salud

El Hospital de Sant Pau es historia viva de la ciudad de Barcelona. Desde 1401 siempre se ha mantenido a la vanguardia de la sanidad catalana. Es en Sant Pau dónde se realiza el primer trasplante de corazón, dónde se crea el primer servicio de urgencias de España, el primer colegio de medicina o la primera unidad coronaria.

Desde su nacimiento como Hospital de la Santa Creu, un centro sanitario pequeño ubicado en el centro de Barcelona, a su traslado al gran recinto modernista actual, el hospital ha multiplicado y diversificado su actividad, dando origen a múltiples iniciativas y programasEstas iniciativas y programas convivían sin una coherencia visual y la atomización disgregaba y debilitaba la marca Sant Pau.

Por todo esto, Sant Pau traza un nuevo plan estratégico y con la voluntad de concentrar toda la actividad en una sola entidad crea una nueva marca paraguas: Sant Pau Campus Salut.

Knock se incorpora al proyecto en este punto. Hemos sido la agencia responsable de planificar y ejecutar un ejercicio estratégico y de branding extenso que da sentido al plan estratégico: para crear una arquitectura de marcas coherente hemos rediseñado la marca paraguas y hemos creado nuevas identidades visuales para las distintas divisiones del campus.

Hemos construido una nueva narrativa transversal que une a todas las marcas en un único universo y que pone en valor la historia de la institución. El objetivo es recuperar su personalidad y proyectarla hacia el futuro

ADN visual

Para que la marca Sant Pau Campus Salut se relacionara de forma coherente con el resto de identidades, diseñadas con anterioridad y distintas entre ellas, hemos hecho un ejercicio que podríamos llamar de armonización visual.

Las primeras identidades del Hospital de Sant Pau, creadas hace ahora 600 años, nacían de la heráldica. Desde entonces, sucesivas actualizaciones de la imagen la han ido simplificando. Rediseñar estas identidades ha representado una oportunidad para reforzar de una forma visual el concepto de historia. En lugar de seguir la inercia, hemos vuelto la mirada hacia atrás, recuperando la heráldica de forma perceptible a la vez que la hemos adaptado a las necesidades del digital.

La mancha de color que divide el escudo, el ajuste de los trazos y el uso en negativo de una cruz patada reforzada, nos permite reivindicar la personalidad sin comprometer su comportamiento en pantalla o cuando requiere adaptarse a tamaños muy reducidos. 

La nueva gama cromática está inspirada en los colores de los mosaicos, las vidrieras y las baldosas hidráulicas tan características del recinto modernista de Sant Pau. No es solo un homenaje, es reforzar la marca siendo fieles a su esencia, desde la narrativa hasta la identidad visual.